El Espacio Didáctico de Nelson: César Girón... Cumbre de la Tauromaquia

El próximo 19 de octubre del 2008 se cumplirá el trigésimo séptimo aniversario de trágico fallecimiento de César Girón, Cumbre de la Tauromaquia, grandioso torero y gloria del toreo en Venezuela y América.

César Girón tenía nombre de emperador romano y, valga la redundancia, fue Emperador del Toreo, desde que recibió la alternativa en Barcelona el 26 de septiembre de 1952, de manos de Carlos Arruza en presencia de Agustín Parra Parrita, hasta el 19 de octubre de 1971, fecha en que ocurrió el desgraciado accidente en el que perdiera la vida el gran torero venezolano.
Desde que comenzó su carrera siempre demostró tener un gran pundonor y amor a la profesión, y gracias a eso y a la casta indomable que corría por sus venas llegó a ser lo que fue en El Mundo de los Toros: Una figura de talla universal.

Maximos trofeos en la plaza mexico.

Durante sus diecinueve años como Matador de Toros, realizó grandes faenas como la realizada el 20 de mayo de 1956, en la Plaza Monumental de Las Ventas, al toro Barrabás, de Alipio Pérez Tabernero; las realizadas en la Monumental Plaza México a los toros Rascarrabias y Juan Gallardo, de los que obtuvo cuatro orejas y un rabo; en Caracas a Platino, de Pastejé, Mayoral, de La Punta, Jilguero y Grillo, de El Rocío; la de Soñador, de Santacilia y la de Jarameño,de Piedras Negras, fueron faenas inmortales para las que nunca existió ni un solo recuerdo en el casi desaparecido Nuevo Circo de Caracas.

También fueron inmortales las que realizó en Maracay a Apetitoso, de Guayabita del que le concedieron hasta una pata, la del toro Desteñido, de Juan Pedro Domecq, indultado en Jerez de la Frontera en la Corrida Concurso de Ganaderías, el 11 de septiembre de 1955 siendo hasta el momento el único torero americano que ha indultado un toro en España.
Ganó infinidad de trofeos en todos los países taurinos que visitó, como La Pluma de Oro de la prensa mexicana, fue triunfador de la Feria de San Isidro en 1955 y 1962, en 1954 le concedieron dos rabos en salidas consecutivas en la Feria de Sevilla, caso único en la historia del toreo para un torero americano y ganó el trofeo de la Feria de Lima obteniendo 10 orejas, 3 rabos y una pata, siendo esta la única otorgada en la feria limeña.

Además cortó veinte patas en toda su carrera, número inalcanzable por ningún otro torero -seis como Novillero y catorce como Matador de Toros- en toda la historia del toreo. Creó cuatro pases de muleta: La Girondina o Bilbaína, La Currita, La Salmantina y La Teresina.
Alternó con los mejores toreros del mundo y nunca se dejó ganar la pelea por ninguno.
Por todo lo que acabo de exponer, César Girón seguirá siendo, mientras no aparezca otro, el mejor torero de América de todos los tiempos y Cumbre de la Tauromaquia.

Firma: Nelson Arreaza